A mis hijos: Emiliano, Leandro y Alexis.
No encuentres en la vida al verbo,
búscalo siempre.
No creas lo que ves, ni lo que oyes.
Ten atentos tus sentidos abiertos.
Dale oxígeno a todas tus esquinas.
Nunca seas inocente como los asesinos.
No cambies tu barca de madera,
por embarcaciones de última tecnología.
Anda siempre tu ruta, no te arrepientas.
Hay hombres hijo mío,
que vagan por el valle lujoso de sus sueños.
Nunca esperes a nadie,
que los amigos llegan,
serenos y distantes, mas ciertos, más amantes.
No estés triste, ni tampoco contento.
Cambia los años por el tiempo.
No preguntes, aguarda las respuestas.
Corta por las mañanas glicinas blancas,
que adornen nuestra mesa
Y después descansa.
Manso espera el alba.
Lucía Serrano
Precioso, me encantó, me quedo con este verso: "Cambia los años por el tiempo" Hermoso.
ResponderEliminarSaludos!
precioso se quedaria pequeño,
ResponderEliminareste poema a tus hijos,
con tu permiso
me lo dedico a mi misma
porque me viene como anillo al dedo
gracias por compartirlo
ES MUY GRANDEEEEE Y ME DICE MUCHAS COSAS
QUE NECESITABA ESCUCHAR
MILLONES DE GRACIAS
Precioso poema este dedicado a tus hijos.
ResponderEliminarDices cosa que nos sirven a todos.
Un abrazo
Durante mucho tiempo leí tus poemas porque me llegaban en el correo diario de Grupo Cero
ResponderEliminarUn saludo grande y un abrazo
La indiscutible voz de una madre... ¡que sabias son a veces! Nos salvan de cada una, que mejor ni hablar.
ResponderEliminar